viernes, 26 de febrero de 2010

SOY TAN ESTÉTICA


Hasta que partí a hacerme la Manicure. Pero claro, una entra a la peluquería y te tientan con un corte, un peinado, que esto y lo otro. Así que salí con las uñas impeques, pero además me cortaron el pelo y me alisaron la chasquilla.

Me devolví caminando a la casa, es cerca. Sentí que le gustaba más al mundo, pero cuando llegué a mi casa ¡vaya desilusión!. Risas. Pero me da lo mismo. Las subarrendatarias siempre son así, envidiosas.

A veces creo que son marimachas o-incluso-“feministas”. Pero tal vez es sólo que yo me valoro más y cuido mi aspecto. Además frente a sus risas, mi actitud es tal cual la que se refleja en esta foto: altivez, seguridad y pensando en el orgullo-como dijo mi nueva ministra del SERNAM, “de ser tan estética”.

Con la misma actitud partí a comerme mis galletas dietéticas. Las odio, pero es la única manera de mantenerme en forma. No es que esté gorda, solo un poco maciza. Además creo que así aumento mis posibilidades con el flaquito de la pieza del fondo.

Claro, ellas se ríen comiendo sus pollos asados con papas fritas y completos de desayuno. Meh! Esas subarrendatarias no saben que a la hora que yo quiero me sirvo mi pedacito de carne, mi papita, mi choripan con cerveza mmmm! Se me hace agua la boca! Uy y de postre…¡frugeles! Uf que tentación. Si sigo así dejaré el régimen!

Pero prefiero no hacerlo tan seguido. Para ser bella hay que ver estrellas.